¿Es necesario un control específico de las redes sociales?
Polémica por la intención del gobierno de crear nuevas figuras penales para frenar los insultos en las redes sociales.
¿Es necesario un control específico de las redes sociales?El ejercicio de la libertad de expresión siempre tiene unos límites muy sutiles ya que puede entrar en conflicto con otros derechos individuales y colectivos con suma facilidad. Internet y las redes sociales han cambiando la forma en que cada uno se expresa y sobre todo ha modificado el alcance que tienen las declaraciones de ciudadanos de a pie. Tradicionalmente los medios de comunicación han recogido las opiniones de personas notables en distintos campos, pero el acceso a esos medios es muy restringido, ya que por su naturaleza no pueden dar cabida a las opiniones de todo el mundo.
Actualmente son muchas las redes sociales existentes pero principalmente son Facebook y Twitter las que acumulan un mayor número de usuarios. La propia definición de la red social Twitter establece un marco en el que con la disponibilidad de 140 caracteres para verter las opiniones que se deseen dan acceso a todos sus usuarios para opinar y contar su visión personal de los hechos más actuales. Pero como todo en la vida, el abuso de esta posibilidad tiene sus consecuencias negativas y puede darse con mucha facilidad que el ejercicio de su libertad vulnere derechos fundamentales de otros.
Motivos por los que controlar las redes sociales
Recientemente se han visto reacciones al asesinato de una persona dedicada a la política que han hecho que de nuevo surja el debate sobre la necesidad de controlar de alguna manera y perseguir a aquellos que aprovechándose del posible anonimato que proporciona Twitter han vertido comentarios que aprueban este acto, otros que además aprovechan para insultar a la persona asesinada, provocando un dolor mayor aún en la familia y personas cercanas de la persona difunta, e incluso algunos alentando a que este tipo de actos delictivos sean practicados con otros políticos.
El debate del control de las redes sociales está ya en los círculos jurídicos y políticos. Estos hechos ocurridos han reavivado el dilema y han provocado intervenciones públicas, como la del Ministro de Interior, en las que se informa de la posibilidad de que el Gobierno cree nuevas figuras penales para castigar este tipo de actuaciones. En principio estas declaraciones no son más que intenciones, pero han disparado todo tipo de reacciones entre abogados, jueces, asociaciones de usuarios de Internet, dirigentes políticos y otros.
Efectos negativos de la regulación
Muchos abogados y personalidades del mundo del derecho indican que no es necesaria la creación de estas nuevas figuras penales, ya que el actual Código Penal en el artículo 510 regula las medidas a tomar en caso de que se provoque discriminación contra grupos por motivos racistas, de ideología, religión, situación familiar, raza, sexo, orientación social o enfermedad. También en el Código Penal, en su artículo 173 se recoge el castigo que se aplicará cuando alguien inflija a otro un trato degradante, con menoscabo grave de su integridad moral.
Se argumenta que las redes sociales no deberían tener un tratamiento específico en el Código Penal, ya que son sólo el medio que se utiliza, los delitos son los mismos que se pueden cometer por otras vías. Además alertan de que un control excesivo de la red hará que ésta pierda su esencia y creen en el ciudadano una sensación de privación de libertad que puede ser muy perjudicial para la sociedad en su conjunto.